🥂 Si siempre te has preguntado cuáles son las
diferencias entre los vinos tintos y blancos, ¡hoy es tu día de suerte! A
continuación, te presentamos algunas diferencias clave entre estos dos tipos de
vino y ejemplos de cada uno para que los pruebes.
Uvas
diferentes: Los
vinos tintos se elaboran con uvas rojas (Pinot Noir, Cabernet Sauvignon, etc.)
y los vinos blancos con uvas blancas (Chardonnay, Pinot Grigio, etc.). Lo
curioso es que casi todos los vinos que encontramos en el mercado provienen de
una única especie de uva llamada Vitis vinifera. Prueba este delicioso tinto
Cabernet Sauvignon de la bodega Vega Sicilia o este refrescante blanco Chardonnay de Marqués de Riscal.
Proceso
de elaboración distinto: Después
de cosechar las uvas, se utilizan diferentes procesos para elaborar vino tinto
y vino blanco. Uno de los aspectos más importantes es que los vinos tintos se
fermentan con la piel y las semillas de las uvas, mientras que los vinos
blancos no lo hacen. Esto se debe a que todo el color del vino tinto proviene
de las pieles y semillas de las uvas. Prueba este sabroso tinto Rioja de la
bodega La Rioja Alta o
este aromático blanco Albariño de Pazo de
Barrantes.
Métodos
de vinificación diferentes: Los
vinos tintos se caracterizan por sus sabores suaves, ricos y aterciopelados,
mientras que los vinos blancos son apreciados por su acidez vibrante, aromas
florales y notas afrutadas puras. Para lograr estos resultados, los enólogos
emplean dos métodos de vinificación muy diferentes. Degusta este elegante tinto
Malbec de la bodega BodegasSalentein o este exuberante blanco Sauvignon Blanc de Bodega Martin Codax.
Compuestos
químicos distintos: La gran
pregunta sigue siendo: "¿Qué tipo de vino es mejor para ti?" Pues
bien, como todos los beneficios para la salud asociados con el vino se
encuentran en las pieles y semillas de la uva, entonces los vinos tintos son el
estilo de vino que comúnmente se considera "mejor" para ti. ¡Pero no
todos los vinos tintos son iguales!
Entonces,
ahora que conoces las diferencias clave entre los vinos tintos y blancos, ¿por
qué no ampliar tu paladar y probar algunos de estos ejemplos
recomendados? Ya sea que prefieras el sabor intenso y aterciopelado de un tinto
o el aroma floral y afrutado de un blanco, ¡siempre hay un vino esperando ser
descubierto y disfrutado! 🍷🥂 ¡Salud!
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